¿No es mala la sal?
Es una pregunta justa. A menudo oímos que comer demasiada sal es malo para la salud, ya que puede elevar la tensión arterial y provocar problemas cardíacos. Esto ocurre cuando el exceso de sal en la dieta hace que el organismo retenga líquidos para diluir la sal. El exceso de agua aumenta el volumen de sangre y, por tanto, la tensión arterial.