La sal es el pequeño elemento de poder que pudo. El cloruro sódico no sólo se utiliza para muchas cosas, sino que también es una potente sustancia antibacteriana. Un agente antibacteriano es aquel que inhibe el crecimiento y la multiplicación de las bacterias. Aunque la sal se utilizó durante miles de años, su componente sódico no se convirtió oficialmente en un elemento de la tabla periódica hasta 1807, cuando un químico llamado Davy lo aisló. Hipócrates, considerado el padre de la medicina moderna, fue uno de los primeros en conocer la naturaleza antibacteriana de la sal. El cloruro de sodio se utiliza mejor como inhibidor microbiano, lo que significa que impide el crecimiento de bacterias, ya que reduce la cantidad de agua presente. Así, las bacterias no tienen la oportunidad de crecer y florecer tanto.
Beneficios de la sal para el cuidado bucal
La sal se utiliza desde hace mucho tiempo como enjuague bucal para eliminar las bacterias presentes en la boca que contribuyen a las enfermedades de las encías y la caries dental. También puedes hacer gárgaras con una fuerte combinación de sal y agua si tienes dolor de garganta, porque la sal mata las bacterias del virus al contacto. Si vas a hacer esto, asegúrate de mezclar al menos media cucharada de sal en agua tibia, asegurándote de disolver toda la sal antes de hacer gárgaras con ella. También se reducirá el dolor y la inflamación de la zona de la garganta.
Limpieza de heridas con sal
La sal marina es un antiséptico y antiinflamatorio natural que durante miles de años se ha utilizado en la limpieza de heridas. ¿Recuerdas la expresión "echar sal en una herida"? Eso es porque eso es lo que la gente hacía en realidad para limpiar cortes infectados, y raspaduras. Suena doloroso, pero puede ayudar en la curación para que la zona quede libre de infección más rápidamente.
Los remedios naturales son a veces la mejor opción para nuestro cuerpo
Todos los remedios naturales pueden ayudar al cuerpo, ya que no eliminan todas las bacterias buenas que nuestro cuerpo produce, como lo hacen los antibióticos recetados. Este remedio de la vieja escuela para hacer gárgaras puede sonar como algo que tu abuela te recomendaría junto con la pasta de dientes de bicarbonato de sodio y beber jugo de zanahoria. Pero tiene sentido si tenemos en cuenta las propiedades antibacterianas de la sal.
La haloterapia como tratamiento antibacteriano
Así pues, si está pensando en someterse a tratamientos de haloterapia o terapia con sal, sepa que la sal que utilizarán en las salas son micropartículas para permitir que la sal penetre en su organismo. Las partículas de sal pueden ser más pequeñas que 1 micrón, que es 1/1000 de milímetro. A medida que inhale la sal que irá a través de sus senos paranasales, en su sistema respiratorio absorbe la humedad tóxica, limpia y elimina el exceso de mucosidad, elimina las bacterias nocivas y reduce la inflamación. La sal no sólo es antibacteriana, sino también antivírica y antifúngica, por lo que la propia sal tiene una serie de beneficios para la limpieza. Las salas son muy estériles, y la experiencia en general abrirá sus vías respiratorias y estimulará su sistema inmunológico.